La proyeción duró casi 90 minutos y salían los principales protagonistas de Jerez: bodegueros, capataces, críticos, historiadores; y nuevos comercializadores, taberneros, cocineros de élite, cantaor flamenco, ....
Me explico.
El vino recién terminado de fermentar por las levaduras vínicas puede ser destinado, a oloroso si se le añade etanol para evitar el crecimiento de la flor, y sucede la oxidación química y lenta hasta llegar a oloroso: con aromas agradables a frutos secos y agradable en boca por su contenido en glicerina.
Con el tiempo y como el el medio es tan pobre que la levadura muere y tiene lugar con el tiempo, mucho tiempo, la oxidación química y tenemos entonces el amontillado. Seco, punzante, avellanado.
Es un fino, dejado en las botas para ser amontillado que se desvía en su evolución hacia una oxidación química, teniendo cualidades de amontillado y de oloroso. Es una rareza, y en los bodegas apenas el 5% de las botas para amontillado llegan a Palo Cortado. Y sus características son de tonos avellanados, suaves en boca, secos, armónico, elegante, astringente.
Se hablaba en la película de las familias bodegueras: Domeq, Osborne, Gonzalez Byass; las nuevas: Estevez, Maestro Sierra.
Como curiosidad, en las reuniones de Domeq y Gonzalez Byass tomaban Almocaden, que era la mezcla de dos finos; cada uno llevaba su fino, La Ina y Tio Pepe, y para beber echaban y mezclaban los dos vinos en la jarra.
Estos vinos necesitan su tiempo y su orden, como decía Manuel Domeq en la proyección.

Bernardo Lucena, de Alvear, que ilustró la cata comenzó con el fino viejo para mostrar el origen del amontillado y Palo Cortado.
- Fino Viejo Capataz, de Alvear, al límite de un vino fino: punzante, muy seco y con aún recuerdos de levadura o de la flor.
- Palo Cortado de Lagar Blanco (Monrtilla-Moriles), intenso a avellanas, suave en boca, vaporoso y salino.
- Palo Cortado Almacenista de Lustau (Jerez), de nuevo frutos secos, suave, muy largo. Según Bernardo, no era un calro palo cortado.
- Palo Cortado Regente de Sánchez Romate (Jerez), más pitente aún. En mi caso, al buen rato olía a cacao.
- Palo Cortado Alboroque de Moreno (Monrtilla-Moriles), extraño, con olor a laca de uñas, después se perdió esa sensación y era muy intenso en nariz y boca, salino, el que más hacía salivar.
De esta bodega ya desaparecida, quedan sólo algunas botellas de ese vino.
Como decía Rafael: El palo cortado es algo raro, por su nacimiento y evolución, y por su calidad nosotros lo hacemos exquisito.
Con cuál te quedas?
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