jueves, 8 de marzo de 2018

Cavas Torelló, en lo más alto de los mejores cavas










Todos conocemos los cavas, y la mayoría proceden de la zona de Sant Sadurni d´Anoia; aunque la DO Cava comprende otras zonas de producción (Valencia, Extremadura, Rioja,...) que tienen. en común su método de elaboración. 

Dentro de la zona catalana existen varias marcas que se posicionaron como de mayor calidad y que no sucumbieron a la tendencia de largas producciones, ya que marcas muy conocidas en los supermercados están intentando sacar cavas especiales para poder recuperar el tiempo y clientes perdidos.

Estas pocas marcas son quizás menos conocidas, como Recaredo, Gramona, Llopart, Giró, Torelló, Agustí Torelló, Juvé Camps...y otras más o menos conocidas.
Esta semana nos visitó en la Asociación de Sumilleres de Córdoba, en casa de Joaquín y AraceliMarcel, el encargado comercial de Torelló (Agustí Torelló, era su sobrino y es empresa independiente). Un tipo muy agradable, cercano, bien preparado, y que nos relató los orígenes de la bodega Torelló. 
La finca Torelló son 135 Has, en una colina, y era ya una propiedad desde 1395, con dos masías, una en la parte baja de la finca y otra en la alta, dedicando una parte de la misma al viñedo. Torelló pertenece a la selecta clase de bodegas que sólo elaboran cava con su propia uva, y digo selecta porque son sólo un 5% del total de bodegas de la DO Cava Cataluña.


A su vez las bodegas antes mencionadas han consensuado sacar al mercado un vino con un marchamo especial, que indica que ese cava se ha elaborado en una parte especial de la finca, y que todo el proceso de elaboración puede ser corroborado. Se llaman cavas de Paraje.


Torelló, así como las mejores marcas de cava se han decantado por los cavas de crianza, con largos tiempos en botella durante la segunda fermentación, y con aportes singulares de manejo del proceso de autolisis de levadura, como es la agitación de las botellas para provocar la liberación de manoproteínas de la corteza celular y que darán al cava su sello identificativo de frescor, acidez, aromas a levadura, etc.


Para empezar tomamos un vino blanco que podría ser un ejemplo de un vino base para el cava. 
Blanc Tranquille, con las tres variedades que dan cuerpo, acidez y aromas al cava: Macabeo, Xarel·lo y Parellada, además de un 2% de Moscatel. Un vino con 11,5º y aromas a manzana, pera, cítricos y una refrescante acidez.
Lo combinamos con una ensalada de frutas.

A continuación el cava Torelló Brut 2012, con una presentación moderna y atractiva.
Este cava ha estado 5 años en crianza en botella, y es el cava más básico. 
De nuevo aromas a manzana, levadura, y se notaban el amargor, que según Marcel, es propio de la Xarel·lo.
Este cava se combinó con una ensaladilla de bogavante.

El tercer cava fue el rosado Parello Pal·lid. Como se ve un vino con ligero color asalmonado y hecho con Pinot Noir y Macabeo.
Se trata de un cava reserva, como todos, con aromas frutales y florales, también muy fresca acidez.
Luis nos preparó un exquisito bocadillo. Pan con semillas, dentro llevaba guacamole, mostaza, y más cosas, que le hacía ser un manjar. Repetimos y cortamos los bocadillos porque valía la pena. 
En este punto, nuestra mesa, que no sé a cuento de qué, ya nos lo estabamos pasando muy bien, y en la que Raúl demostró cómo cortar un bocaillo con un cuchillo que apenas cortaba, sin destrozarlo,... como me pasó a mi.

El cuarto cava, Brut Nature, tenía ya 70 meses de crianza. Más de 10 años.
Y es el que más vende esta bodega (y sobre 20 euros, para quien se anime a comprarlo). 
Elaborado con las tres uvas blancas, Macabeo, Xarel·lo y Parellada, muestra una evolución perfecta de la crianza en botella. Muy rico, con notas de levadura, fresco, fruta. 
Eso en nariz, porque el gusto en boca era exquisito. Muy equilibrado y potente.
Este cava se acompañó de una brandada de bacalao. Y de una carne muy bien hecha en casa de Antonio F. que ha demostrado tener una familia donde bien valdría que lo invitaran a uno a comer.

El último cava fue el que seleccionaron en Torelló como cava de paraje, el Torelló 225. Se trata de un mosto de las tres uvas blancas habituales, y fermentado en barricas de 225 litros, de ahí su nombre.
Curiosamente no era el cava con más crianza, pero era como los demás un vino muy fresco, de gran potencia aromática y retrogusto.


Fue una muy buena cata, cuatro vinos en botellas Magnum, y expuesta por un buen profesional, que hizo la cata rápida, amena y que dejó que fueron sus vinos quienes nos convencieran. Enhorabuena a la bodega.


Tengo que decir que Jose María cumplió años, lo cual no es noticia, porque todos lo hacemos. Más bien por la alegría que tuvo de poder celebrarlos en compañía de sus amigos y por la inmensa cata que se trajinaron. ¡La leche! Como allí decíamos, ¿cuántos años han cumplido? Seguro que pocos. Felicidades, chaval.

 Y finalmente sólo queda decir que ya muchos nos veremos en la próxima cata de la Asociación.














4 comentarios:

  1. Muchas gracias D. JOSE, pasamos una noche buenísima!!! Todavía me sonrío cuando veo las fotos! Un abrazo!!

    PD. Gran post por cierto!!

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  2. Gracias por el ilustrado, documentado y ordenado post. Refresca las neuronas y activa la memoria Pepe.
    Torello cavas, excelentes propuestas.

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  3. Sería ilustrado e interesante crear un libro que recopile los post de las catas celebradas durante el año vinícola de la ASC y llevarlo a impresión y encuadernación en un libro para su distribución entre los asociados y por supuesto, un ejemplar para regalar a los bodegueros.
    Es una sugerencia, cordial saludo .

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