Ya hay que beber menos para tomar mucho resveratrol

Supongo que ya habreis oido las múltiples aplicaciones farmacológicas que se vienen describiendo del resveratrol. Este compuesto que contienen las nueces, una planta medicinal china, y las uvas actúa en los racimos como antifúngico. La casualidad es que se parece bastante en su fórmula a las hormonas esteroideas femeninas y también actúa e inhibe a distintos procesos patofisiológicos, como el cáncer, la artereosclerosis, y parece que alarga la vida de organismos y evita los problemas asociados a la obesidad. ¿Alguien da más? Las concentraciones precisas para estos efectos son sobre 100 a 300 mg/L.
Su aparición en el vino tinto se debe a que al ser antifúngico, está en la piel, y justo en la elaboración de tintos se trabaja y macera la piel. Se puede incrementar su concentración en la uva antes de vendimia, y tras la vendimia de varias formas: iluminación ultravioleta de las uvas, dejar las uvas en atmósfera inerte durante varias horas, y alguna más. Pues bien, un tinto ecológico de Toro, Volvoreta, contiene 15 mg de resveratrol/L cuando lo normal es que fuera sobre 5 mg/L. Tres veces más. Si no se tratan las viñas con fungicidas de síntesis, la planta sintetiza sus propias defensas, entre ellas el resveratrol. Este parece ser el éxito de esta bodega y de este vino.
Como quiera que hasta ahora se precisaban 20 litros de vino consumidos diariamiente para recibir dosis terapeuticas, pues ya estamos más cerca. Con 6 botellas, ya casi llegamos. Un brindis por los vitivinicultores que se preocupan de nuestro paladar y nuestra salud.